Duro golpe a la producción mendocina

Después de cinco años de cosechas exitosas, Argentina, y en particular la provincia de Mendoza, tendrá un año difícil. Las tormentas de granizo o piedra y una humedad ambiental más alta de lo normal son los enemigos que este año han puesto en riesgo la cosecha de uvas en el oeste argentino. Sin lugar a dudas los principales damnificados serán aquellos productores que han destinado sus uvas para la elaboración de vinos finos y de calidad superior.

Las bajas temperaturas registradas durante la noche y la humedad excesiva para esta parte del continente, crean tormentas que se forman en lo alto de la Cordillera de Los Andes. Aunque las tormentas de piedra o granizo tienen la característica de ser tormentas focalizadas. De esta manera es probable que la tormenta afecte a una hilera de viñedos y no tocar en lo más mínimo a la de al lado.

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