Nunca es relevante el alto precio de una etiqueta cuando se trata de un vino único, de esos que se producen en partidas limitadas y representan la máxima expresión de cada bodega y la exclusividad. A ellos dedican las uvas más selectas, las barricas más cuidadas y la mayor cantidad de tiempo para su elaboración. Sin embargo, varios factores hacen que una botella se convierta en un gran vino: desde la precisión en la finca hasta la escasa producción, pero también el trabajo de marketing, los premios ganados, la trayectoria y los altos puntajes. Hoy, la nueva generación de enólogos argentinos empieza a concebir verdaderos vinos únicos, muchos de los cuales alcanzan los niveles más altos de refinamiento enológico, especialmente con nuestra cepa insignia, el Malbec. La búsqueda de calidad los lleva a probar nuevos caminos y a trabajar de un modo más preciso. Una selección de las marcas que van por la senda del Nuevo Mundo.
ALTAR UCO BLEND 2014
Bodega Altar Uco, Mendoza, $830
Nuevo vino de autor con el sello del enólogo Juan Pablo Michelini, de edición limitada y una expresión aromática de singular elegancia. Elaborado con Malbec (50%), Cabernet Franc (30%) y Merlot (20%), y 12 meses de crianza en barricas de roble francés, 12 meses en ánfora y 12 meses en botella, se nota su estilo innovador. Tiene concentración de fruta, buena fluidez, estructura sostenida por la acidez, frescura mineral, taninos dulces, dejos herbales y especiados que le dan complejidad y una personalidad única, además de mucha vida por delante (10 años).
PARADOUX BLEND
Bodega Alandes, Mendoza, $680
No solo es un vino top, sino que es un blend nacional que sigue los lineamientos de los Grand Cru de Burdeos. Elaborado por el enólogo Karim Mussi con partes iguales de Malbec, Merlot, Petit Verdot, Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc, de antiguos viñedos de Maipú (primera zona de los vinos mendocinos) de distintas añadas y 12 meses de crianza en roble francés, tiene un perfil moderno con un toque propio que lo diferencia. De paladar suave, fresco, elegante y frutado, con taninos finos y final persistente, es un auténtico placer que va de menor a mayor.
LEJANAMENTE JUNTOS 2013
Bodega Trivento, Mendoza, $640
Este vino se descubre lentamente. Es un blend de lujo de uvas Malbec (60%) de Luján de Cuyo y Cabernet Sauvignon (40%) de Vista Flores (Valle de Uco), con 18 meses de crianza en roble francés (5% nuevo), del que solo se elaboraron 2.800 botellas. Su color es bordó y sus múltiples aromas sorprenden por su intensidad. No es un vino potente, sino más bien delicado que tiene la dulzura del Malbec de viñedos muy antiguos, taninos equilibrados, redondez y la complejidad del Cabernet muy frutal y fresco. Su sabor cautiva al instante y seguirá mejorando con los años.
AYNI MALBEC 2015
Bodega Chakana, Mendoza, $550
Uno de los Malbec más elegantes de la nueva era. Elaborado con uvas de viñedos orgánicos de Altamira (Valle de Uco) y un 3% de Cabernet Franc, tuvo 12 meses de crianza en barricas de roble usadas y toneles de 5.000 litros, y alcanzará una envidiable complejidad. De color rojo oscuro con intensos aromas frutados y especiados que se funden con notas del añejamiento, se destaca por su estructura importante, taninos maduros, frescura, volumen y untuosidad. Tiene mucho potencial de guarda y todo para evolucionar favorablemente, pero ¿por qué esperar?
DOÑA PAULA ESTATE BLUE EDITION VELVET BLEND 2016
Bodega Doña Paula, Mendoza, $240
Este blend de Malbec (60%), Pinot Noir (30%) y Bonarda (10%), elaborado por el enólogo Marcos Fernández, con uvas de Gualtallary (Valle de Uco) y 12 meses de crianza en roble francés (de 2° y 3° uso), es un vino innovador sin perder su esencia. Sus aromas le dan un atractivo único (mezcla de frutos rojos y negros, especias y hierbas), pero lo mejor pasa en la boca: es amable, redondo, de taninos suaves y una acidez que hace más placentero cada trago.
Fuente: La Nación
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